
Análisis del Conflicto Global:
De la Cumbre Trump-Putin a la Crisis de Liderazgo Occidental
Por: Rodrigo Bernardo Ortega
Octubre de 2.025
El panorama geopolítico actual se define por la confluencia de conflictos armados, una diplomacia polarizada y una profunda crisis de legitimidad y capacidad en el liderazgo occidental. Este análisis condensa las discusiones sobre tres ejes principales: los acuerdos emergentes en la guerra de Ucrania tras la cumbre entre Donald Trump y Vladimir Putin; la decadencia del liderazgo político en Europa y Estados Unidos; y el dramático colapso moral y estratégico de Occidente ante el genocidio en Gaza.
I. La Cumbre Trump-Putin y el Nuevo Camino en Ucrania
La reunión de alto nivel entre el presidente ruso, Vladimir Putin, y el presidente estadounidense, Donald Trump, celebrada en Alaska, marcó un punto de inflexión en el enfoque diplomático del conflicto en Ucrania. El evento, que se llevó a cabo después de tres años y medio de boicot occidental a la diplomacia rusa, se caracterizó por la cordialidad y la calidez, lo que generó reacciones polarizadas que oscilaron entre el «optimismo extremo» y el «pánico absoluto» en Europa.
El logro más significativo de la cumbre, fue el alineamiento de Trump con la postura rusa, dejando atrás la exigencia occidental de un «alto el fuego inmediato e incondicional». Ambos líderes coincidieron en que el objetivo debe ser un «tratado de paz genuino» que resuelva las «cuestiones subyacentes» que causaron la guerra, en lugar de una simple tregua provisional.

Trump se reúne Putin en la pista de aterrizaje de Alaska.
Los detalles de los acuerdos, aunque inicialmente no se hicieron públicos, fueron filtrados a la prensa, revelando la propuesta rusa en el ámbito territorial:
- Cesión Total de Donbas: Rusia debe recibir la totalidad de los oblasts de Donetsk y Lugansk, exigiendo la retirada completa de Ucrania de esos territorios, aunque la narrativa occidental minimiza el control ruso sobre Donbas, la irrebatible realidad es que la toma completa del territorio es inminente.
- Compromiso en Nueva Rusia: Rusia estaría dispuesta a negociar o comprometerse respecto a los otros dos oblasts que conforman la «Nueva Rusia» (Zaporiyia y Jersón).
La filtración de estos acuerdos generó pánico en Europa y Ucrania, donde los líderes hicieron grandes esfuerzos por confundir a la opinión pública sobre la diferencia entre un alto el fuego y un tratado de paz. La postura europea, que argumenta que un tratado de paz «solo prepara el terreno para la próxima guerra», en realidad es una propaganda que solo busca prolongar el conflicto.
La insistencia en la necesidad de «fuerzas de paz» para hacer cumplir un tratado fue rechazada por Putin y Trump. La lógica rusa es bien clara: si el tratado aborda las causas fundamentales del conflicto (como la expansión de la OTAN o la seguridad mutua) y elimina las cuestiones que separan a las partes, no habrá necesidad de fuerzas de paz porque el conflicto no se reavivará.
La cumbre también puso de relieve un nuevo enfoque en las relaciones bilaterales entre Estados Unidos y Rusia, sugiriendo que ambos no están dispuestos a ser «rehenes de lo que ocurre en Europa». Este bilateralismo, aunque carece de una base económica sólida, pues el comercio entre EE. UU. y Rusia nunca ha sido significativo, se justifica por sus intereses comunes en la gobernanza mundial y la seguridad global lo que implica el control de armas.
La clave del conflicto y la solución radica en el fracaso de Europa al institucionalizar la exclusión de Rusia mediante la expansión de la OTAN y la Unión Europea (UE). Al negar a Rusia una voz legítima para defender sus intereses de seguridad en las instituciones internacionales, Occidente dejó a Moscú con la «opción militar como la única posible».
Si analizamos cuidadosamente la aparente volubilidad retórica de Trump, encontramos que no se debe a la desinformación, sino a una estrategia calculada para desorientar a sus oponentes y llevar a cabo su plan de manera gradual. El cambio de postura de Trump del «alto el fuego» al «tratado de paz» no es una manipulación de Putin, sino la implementación gradual de su propia agenda.
De cara a la reunión con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, se preveía que Trump le comunicaría que había adoptado la posición rusa sobre el fin de la guerra, exigiendo a Ucrania la cesión formal y permanente del llegó y partes de Nueva Rusia, restricciones en el tamaño de su ejército y la exclusión permanente de Ucrania de la OTAN.
Se preveía que esta reunión seria «muy difícil» para Zelenski, y Trump llegó a decir que está dispuesto a «dar la espalda a Ucrania y a los europeos» si continúan obstaculizando el camino hacia un acuerdo de paz.
Para comprender mejor los hechos y las posteriores actuaciones de los actores de este entramado, es imprescindible primero hacer un análisis geopolítico más detallado:
II. La Decadencia del Liderazgo Occidental y la Ceguera Estratégica en Ucrania
El análisis geopolítico subraya que la crisis en Ucrania y la respuesta occidental son síntomas de una profunda decadencia en la cultura política e intelectual de Occidente, donde la racionalidad ha sido suplantada por el odio y la propaganda.
Existe un «colapso intelectual» en el liderazgo europeo, que ha puesto a «sucesiones de idiotas» e individuos «sin educación» en el poder, haciéndolos incapaces de abordar desafíos de gran envergadura. Esta mediocridad ha llevado a la criminalización de la diplomacia, donde el odio se ha convertido en una forma de «moralidad» que prohíbe el diálogo y el respeto básico con el adversario.
La consecuencia directa es que Europa se está volviendo «geopolíticamente irrelevante».
El discurso público occidental cree que Ucrania está ganando. Sin embargo, esta narrativa es un «delirio». La realidad es que:
- Ucrania está en «serios problemas»: Está luchando por cubrir sus líneas de frente debido a la escasez de tropas.
- Reconocimiento de la Derrota: El propio general ucraniano Valery Zaluzhny reconoce que la guerra es de desgaste y que, si continúa, Ucrania perderá, sin tener una «fórmula mágica» para la victoria.
- La Negociación Imposible: Ucrania ha perdido la guerra. La pregunta no es si conseguirá un buen acuerdo, sino cuál es el «acuerdo menos malo», que implica detener el conflicto de inmediato y hacer grandes concesiones para evitar una destrucción total del país.
El liderazgo occidental justifica su apoyo continuo a la guerra en Ucrania mediante una narrativa que pinta a Rusia como una «amenaza mortal», dispuesta a conquistar toda Europa del Este. Este argumento es absurdo por los siguientes motivos:
- Incapacidad Militar: El ejército ruso, que ha tenido problemas para asegurar el este de Ucrania, carece de la capacidad logística y numérica para «arrasar con toda Europa» o llegar a Dunkerque.
- Lecciones de la Historia: Putin entiende que la ocupación de países con fuertes sentimientos nacionalistas (como la URSS en Europa del Este o Afganistán) es una «receta para el desastre». El objetivo de Moscú es convertir a Ucrania en un «estado visagra» o estado «colchón» , no absorberla en absoluto.
Los líderes europeos, convencidos de que Rusia es el «Tercer Reich», utilizan a Ucrania como una «herramienta para desangrar y desgastar» al ejército ruso. Esta estrategia, además de ser un «desastre total» para Ucrania, es producto de una ceguera ideológica.
El conflicto se ha caracterizado por un peligroso «incrementalismo», donde se han realizado acciones impensables al inicio de la guerra, como el suministro de sistemas avanzados (HIMARS, F-16) y, lo que es más impactante, la invasión ucraniana de territorio ruso (Kursk) y los ataques a las fuerzas de bombarderos estratégicos (una pata de la tríada nuclear).

Cada vez armas más letales llegan a Ucrania, a pesar de los pocos efectos en terreno
Estas acciones representan un coqueteo con el desastre nuclear, algo que era «impensable» durante la Guerra Fría. La pregunta crucial es si la OTAN podrá aceptar la «derrota asombrosa» que se avecina. La incapacidad de las élites para aceptar la derrota y la falta de voluntad para cambiar una estrategia fallida (que preveía el colapso de la economía rusa por las sanciones, lo cual no sucedió) sugieren que los «tiempos realmente peligrosos» están por delante, con un alto riesgo de escalada final por desesperación occidental.
III. El Colapso Moral y la Crisis de Legitimidad: El Caso de Gaza
La gestión del conflicto en Gaza se erige como la prueba definitiva de la bancarrota moral y estratégica de Occidente, ilustrando el declive geopolítico más amplio.
El argumento de que Israel es un «activo estratégico» para EE. UU. No es tan cierto, pues Israel es, de hecho, una «carga estratégica» y un «lastre» para los intereses estadounidenses en Oriente Medio. Solo recordemos que la causa principal de la hostilidad contra EE. UU., incluido el ataque del 11 de septiembre, fue el apoyo incondicional a Israel.
Este apoyo incondicional se debe al «poder del lobby israelí,» que logra que Washington trate a Israel de manera fundamentalmente diferente a cualquier otro país, incluso en contra de la opinión pública estadounidense, que mayoritariamente apoya el fin de la ayuda.
El punto central del análisis es que Occidente (principalmente EE. UU. y sus aliados europeos) es «cómplice de un genocidio» que está ocurriendo a plena vista. Israel, un «estado de apartheid», no podría llevar a cabo el genocidio sin el apoyo militar y económico incondicional de Estados Unidos, que ha proporcionado miles de millones de dólares en ayuda desde el inicio de la operación.

Comparativa de fotografías satelitales en Gaza (Mayo 2023/Octubre 2023)
El objetivo principal de Israel en Gaza es la limpieza étnica para crear un «Gran Israel» libre de palestinos. Aunque fracasaron en la expulsión total (debido a la negativa de Egipto y otros países a aceptarlos), el genocidio continúa con el objetivo de castigar y destruir.
El llamado plan de paz de Trump, bautizado como «Paz Duradera,» es inviable y fue elaborado en conjunto por Israel y EE. UU. (un plan israelí-estadounidense), presentado a los palestinos como un «hecho consumado» y una amenaza.
El plan, considerado un proyecto «neocolonial», exigió que Hamás la entrega de todos los rehenes, lo cual acaba de suceder y como segunda fase exige un desarme total y la destrucción por completo de los túneles. Este segundo punto todavía no se ha definido de manera clara y existen grandes riesgos.
A cambio, el plan ofreció un futuro para Gaza con:
- Control israelí continuado: A través de una retirada por fases y el control del perímetro de Gaza.
- Gobernanza de potencias coloniales: Gaza sería dirigida por fuerzas internacionales (como EE. UU. y Gran Bretaña), con figuras como el fatídico Tony Blair a cargo.
- Ausencia de Estado Palestino: El plan no se compromete con un «horizonte político» claro ni con la creación de un Estado palestino, lo que significa que a los palestinos se les pide capitular a cambio de la no autodeterminación.
La reacción de las élites occidentales (su incapacidad para detener el genocidio y su complicidad) es la máxima expresión de la crisis de la élite de la Posguerra Fría. Estos líderes, que creyeron que entregaban una «paz perpetua a través de la hegemonía liberal», están ahora en pánico.
La hipocresía de las élites europeas es asombrosa: mientras claman por valores liberales y derechos humanos, son cómplices de un asesinato en masa que ocurre a plena vista. La élite política está actuando de manera insensata, tanto desde un punto de vista estratégico como moral. Esto, como comentó un político alemán («Israel está haciendo nuestro trabajo sucio»), refleja la profunda crisis en su visión de su lugar en el mundo, un colapso que la historia, no juzgará bien.
Fuentes:
- Trump News: Experts Break Down Alaska Talks’ Dramatic U-Turn | Trump Putin Meeting – YouTube
- BREAKING | Alaska Summit: Lasts Less Than 3 Hours | Trump-Putin Address Ends On A ‘Good Note’ | WION
- Ucrania como problema existencial: la lectura de Mearsheimer – CEMEES
- Oleksiy Arestovych: Zelenskyy’s challenger – UnHerd
- Análisis: cuán significativo es realmente el plan de Trump para Gaza y qué dudas genera
- Here’s how Trump’s proposed Gaza peace plan would work – CBS News